Hyundai ya no se trata sólo de automóviles asequibles y confiables. Durante las últimas dos décadas, la marca se ha convertido silenciosamente en un líder en diseño, y la reciente presentación del concepto Ioniq 6 N y Crater en el Salón del Automóvil de Los Ángeles de 2025 solidifica este cambio. La rápida mejora estética de la compañía rivaliza con sus avances en calidad mecánica, y su equipo de diseño, reforzado por el talento de fabricantes de automóviles de lujo como Bentley y Rolls-Royce, ahora está produciendo algunos de los vehículos más llamativos del mercado.
El auge de XRT y la arquitectura de doble capa
La evolución del diseño de Hyundai no se trata sólo de refinamiento; se trata de expansión. El fabricante de automóviles ha inculcado con éxito una estética familiar consistente y, al mismo tiempo, ha dejado espacio para la creatividad en sus líneas todoterreno EV, N performance y XRT. La gama XRT, en particular, se está convirtiendo en un área clave de innovación.
El jefe de estilo de Hyundai, Simon Loasby, enfatiza que el XRT se trata de capacidad genuina, no sólo de actualizaciones cosméticas. Esto significa características del mundo real como mayor altura de manejo, neumáticos todo terreno, tracción en las cuatro ruedas y protección reforzada para los bajos. Los comentarios obtenidos de conceptos como el Crater influirán directamente en los futuros modelos de producción.
Pero el Cráter es también un campo de pruebas para opciones de diseño más ambiciosas. La “arquitectura de doble capa”, un interior optimizado y centrado en la tecnología que prioriza la seguridad y la participación del conductor, llegará a los próximos vehículos Hyundai en los próximos 12 a 14 meses. No se trata sólo de apariencia; se trata de integrar la funcionalidad con una experiencia de usuario moderna e intuitiva.
Influencia del automovilismo y diseño emocional
El enfoque de Hyundai hacia el diseño también está impulsado por su división de deportes de motor. Los ingenieros responsables de la línea N Performance se centran incansablemente en la optimización y sus hallazgos impactan directamente tanto en la aerodinámica, el ajuste de la suspensión y la estética general de los modelos de alto rendimiento. Este enfoque práctico, basado en datos, se traduce en señales de estilo agresivas, como aletas traseras en forma de cuello de cisne, que comunican potencia e intención.
Sin embargo, el objetivo final no es sólo el rendimiento. Loasby destaca que Hyundai quiere que sus vehículos evoquen emociones positivas. El lenguaje de diseño es deliberadamente optimista y tiene como objetivo crear automóviles que la gente realmente disfrute mirando. El objetivo: un vehículo que incluso los niños reconozcan y admiren.
Mirando hacia el futuro
El compromiso de Hyundai con el diseño está dando sus frutos. La marca ya no se limita a fabricar coches mecánicamente sólidos; está creando vehículos que se destacan entre la multitud. El Ioniq 6 N ya demuestra esta evolución, pero el concepto Crater sugiere un futuro aún más convincente para la gama Hyundai.
“Hace sonreír a la gente”, dice Loasby. “Eso es lo que queremos: un mensaje optimista y positivo”.
El éxito de Hyundai no se trata sólo de estética. La compañía ha demostrado que invertir en talento de diseño e integrarlo con conocimientos de ingeniería y deportes de motor puede dar como resultado vehículos visualmente impactantes y funcionalmente superiores. Esto no es sólo una tendencia; es un cambio estratégico que posiciona a Hyundai como un actor importante en el panorama del diseño automotriz.
